viernes, 6 de febrero de 2015

MUJER BELLA


La belleza en la mujer no es algo subjetivo sino que hay criterios objetivos muy claros.
El pelo ha de tener volumen y ser sedoso, que apetezca jugar con el en tus manos. No vale un pelo pegado a la cabeza y/o corto, tipo masculino.
Las cejas finas y marcando el contorno superior de los ojos, de modo que estos queden sugerentes pero disimulados. No valen los ojos de besugo, te echan para atrás nada más verlos.
La boca ha de ser de labios apetitosos, ni muy gruesos ni muy finos. Que te pidan que los beses, pero no tan gruesos que parezcan de perro ni tan finos que ni les puedas pasar la punta de la lengua por ellos.
El cuello largo, no que sea de cisne tampoco, pero si que permita definir bien la cabeza, de modo que no se confundan las orejas con los hombros. Y que al apartar el pelo, te pida a gritos un mordisquito.
El pecho ya se sabe, la teta que en la mano quepa. Y con un canalillo atractivo, no que vaya cada teta por su lado.

El culo prieto y terso, bien redondeado y hecho como para no sentarse. Para cuidar ese detalle, mucha gimnasia, y sentarse más bien en el borde de la silla.

Las piernas de muslos no muy gruesos, y mejor largas que cortas. Y que se sepan cruzar con insinuación pero sin descaro.

Todo esto hace bella a una mujer, belleza que es síntoma de fertilidad.