miércoles, 21 de enero de 2015

LAS EMOCIONES


En esta vida siempre tendrás 2 opciones: Controlar tus emociones o dejar que las emociones te controlen a tí.
Los celos, por ejemplo, son una manifestación de miedo. Miedo de no ser “tan bueno” como alguien más, miedo de ser abandonado porque no eres “perfecto” o “el mejor”.

Conoce el tipo de situaciones que te causan cada emoción y aprende a notar la diferencia entre el enojo y el miedo, a veces varias emociones pueden surgir al mismo tiempo y tal vez la persona que las está sintiendo no puede distinguirlas.
También es bueno reconocer una emoción en el momento en que se materializa, en lugar de dejar que crezca y se intensifique. Lo último que quieres hacer es ignorar o reprimir tus sentimientos, porque si estás leyendo esto, probablemente sepas cuándo haces eso, y esos sentimientos tienden a empeorar y estallar más delante.
Por eso no te agobies ni permitas que el actuar de alguien más te afecte, pues a veces nos alimentamos con sentimientos de frustración, tristeza o desanimo por preocuparnos por alguien más y te olvidas de ti mismo. Por último y lo más importante es que pidas a Dios serenidad a tu espíritu y desde ese momento notaras la diferencia, pues la paz inundara tu corazón.